El activista y periodista venezolano Carlos Julio Rojas cumplió 200 días detenido, según denunció este viernes su esposa, Francy Fernández, a través de una nota de prensa, de "manera arbitraria" en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), en Caracas, donde permanece -aseguró- "sin derecho a la defensa (privada)".
Por su parte, el abogado del activista, Eduardo Torres, exigió que se garantice "el debido proceso" y el derecho a la designación de defensa privada, que "acceso a los expedientes" para conocer "las acusaciones", y poder así proceder con la representación judicial del detenido.
El periodista fue detenido el pasado 15 de abril y acusado, según el fiscal general, Tarek William Saab, de los delitos de asociación, terrorismo, conspiración, instigación para delinquir y magnicidio en grado de tentativa.
El intento de magnicidio que se le imputa se debe, según la autoridades, a que está supuestamente vinculado a un plan para asesinar al jefe de Estado, Nicolás Maduro, durante el acto de inscripción de su candidatura, el pasado 25 de marzo, de cara a las elecciones presidenciales, que se celebraron el 28 de julio.
Saab explicó que el periodista forma parte de Vente Venezuela (VV), el partido fundado y liderado por la líder opositora María Corina Machado, y aseguró que recibía órdenes de la exdiputada para generar protestas violentas en el país.
VV cifra en más de 150 los políticos opositores detenidos "arbitrariamente", entre ellos dirigentes nacionales y personas que ocupaban cargos de elección popular cuando fueron arrestados.
La formación, así como diversas ONG, aseguran que no cometieron ningún delito, por lo que -insiste- están recluídos por motivos de conciencia, mientras que el canciller venezolano, Yván Gil, aseguró recientemente que el país caribeño está "libre de presos políticos", una afirmación criticada por el antichavismo y diversos sectores sociales, así como los familiares de los reos.
EFE