Un refinador de petróleo respaldado por el inversor Carl Icahn y un grupo de acreedores que tienen reclamos contra Venezuela están compitiendo en la última fase de una subasta judicial en Estados Unidos por Citgo Petroleum, dijeron tres fuentes.
Un total de 18 acreedores que tienen fallos por incumplimientos de deuda y expropiaciones en Venezuela por 21.300 millones de dólares están buscando cobrar ingresos de la subasta de acciones en la matriz de Citgo, organizada por un tribunal federal en Delaware. Pero no se espera que las ofertas cubran esa cantidad en su totalidad.
Un grupo de inversionistas que incluye a la minera Gold Reserve y una unidad del conglomerado Koch Industries han ofrecido alrededor de 9.000 millones en una oferta que combina efectivo y crédito, dijeron dos de las personas, que no estaban autorizadas a hablar públicamente sobre el asunto.
CVR Energy, controlada por Icahn, presentó por separado una oferta totalmente en efectivo de alrededor de 8.000 millones de dólares, dijeron las personas con conocimiento de la subasta.
Las dos ofertas actuales superan la oferta más alta de 7.300 millones de dólares presentada en una primera ronda a principios de este año, pero están muy lejos de la valoración de mercado de Citgo de entre 11.000 y 13.000 millones de dólares.
El proceso ha permitido que empresas como Gold Reserve, que tiene un reclamo de más de 1.000 millones de dólares, y Koch Industries, con una reclamación de 457 millones de dólares, unan fuerzas con inversores asesorados por el banco de inversión Centerview Partners, que han aportado efectivo a la oferta, añadieron dos fuentes.
Gold Reserve y el funcionario judicial que supervisa la subasta, Robert Pincus, declinaron hacer comentarios. Centerview no proveyó comentarios de inmediato, mientras que Koch no respondió a las solicitudes de comentarios.
CVR declinó hacer comentarios, pero el director ejecutivo de la empresa a finales de julio dijo a inversores que la firma estaba explorando transacciones estratégicas en refinación.
Gold Reserve dijo en junio que había obtenido 36 millones de dólares a través de una colocación privada de acciones y había conseguido un socio, FJ Management, para apoyar su oferta.
Al menos cinco grupos de inversores presentaron ofertas vinculantes en la segunda ronda y tres consiguieron compromisos de financiación de bancos y asesores, entre ellos JPMorgan, Morgan Stanley y Rothschild & Co, dijeron a Reuters en julio personas cercanas al asunto.
Según los términos del tribunal, los postores tienen la oportunidad de añadir más participantes a sus ofertas para aumentar su valor y también pueden completar sus ofertas después de haberlas presentado, lo que hace que el proceso sea dinámico.
Pero debido a las voluminosas reclamaciones, algunos acreedores terminarán con las manos vacías independientemente de cuál de las ofertas sea aceptada por el tribunal. Tenedores de bonos con reclamos contra Venezuela también han protestado porque en gran medida se les ha excluido de la subasta.
Venezuela, que se encuentra en medio de una aguda crisis política tras una elección presidencial disputada, ha calificado la subasta como un robo de su preciado activo extranjero. Citgo y sus juntas supervisoras también han luchado para retrasar la subasta y ganar el apoyo de Estados Unidos para retener la propiedad venezolana.
El séptimo mayor refinador de Estados Unidos por volumen ha estado controlado por juntas supervisoras designadas por la oposición de Venezuela desde 2019, cuando cortó lazos con la petrolera estatal venezolana PDVSA tras la imposición de sanciones estadounidenses.
Citgo, la joya de la corona de los activos extranjeros de Venezuela, tiene terminales de almacenamiento, oleoductos y tres refinerías de petróleo que pueden procesar hasta 807.000 barriles por día de petróleo para convertirlos en combustibles.
Reuters