El Gobierno de Venezuela analiza el comportamiento de su último glaciar, ubicado en el estado andino de Mérida (oeste), en busca de "información valiosa" sobre esta masa de hielo que entró en proceso de extinción, según explicó a EFE el ministro de Ecosocialismo (Medioambiente), Josué Lorca.
Para obtener estos datos, las autoridades desplegaron en febrero un manto geotextil sobre la masa de hielo -de 0,02 kilómetros cuadrados, según estimaciones independientes- que queda de La Corona, un glaciar que durante su apogeo cubrió 4,5 kilómetros cuadrados del Pico Humboldt, a unos 4.900 metros sobre el nivel del mar.
"Venezuela puede dar mucha información valiosa de acuerdo a este proyecto que estamos haciendo el día de hoy para que los demás países que van en el mismo camino (de calentamiento) protejan sus glaciares", señaló el ministro, que considera impreciso declarar la extinción del glaciar, si bien admite que su eventual desaparición es irreversible.
Dijo que el Ejecutivo, que prepara un primer informe sobre el caso, maneja un "criterio distinto de medición de la pérdida o no del glaciar", pues -argumentó- "la imagen satelital no muestra la capa de hielo que no es totalmente blanca".
Aunque prefiere no hacer estimaciones sobre el tiempo de vida que le quedan a los fragmentos de hielo, insiste en la importancia que tiene, "para el futuro", esta observación que hace Venezuela "con visión sudamericana para que sea un ejemplo" para la región.
"(Se trata de entender) qué podemos hacer bien y cómo podemos ayudar a darle un respirito de más años a nuestros glaciares", remarcó.
Lorca indicó que los gastos de todo el proyecto del manto geotextil están pagados al 100 %, lo que asegura el retiro de este dispositivo una vez que concluyan las mediciones del período de extinción.
"El proyecto está programado a un año o año y medio, el manto deberá ser retirado. De acuerdo a las estimaciones y de acuerdo al avance del proyecto, nosotros deberíamos estar bajando el año que viene el manto geotextil", adelantó.
EFE