Un tribunal federal de Estados Unidos probablemente extenderá un período para revisar las ofertas presentadas en una subasta de acciones de la matriz del refinador venezolano Citgo Petroleum, dijeron tres personas cercanas al asunto, lo que retrasaría la conclusión del caso que lleva siete años.
La subasta de la matriz del séptimo mayor refinador de Estados Unidos tiene como objetivo satisfacer hasta 21.300 millones de dólares en demandas contra Venezuela por expropiaciones e impagos de deuda. El proceso podría conducir a un cambio de propiedad de un activo considerado la joya de la corona extranjera de Venezuela.
El tribunal había planeado finalizar el proceso de venta, que incluyó dos rondas de licitación, el 15 de julio, días antes de las elecciones presidenciales de Venezuela del 28 de julio, las que Washington ve como una posible salida a la crisis política de larga data del país sudamericano.
No obstante, las ofertas presentadas en la segunda ronda han demostrado ser más complejas de lo esperado, con muchas de ellas combinando efectivo con crédito por parte de algunos de los 18 acreedores autorizados por el tribunal, dijeron las fuentes.
También se pidió a los postores que revelen si sus ofertas incluyen planes para pagar a los tenedores de un bono garantizado con acciones de una de las matrices de Citgo, lo que añade otro nivel de complejidad.
"Los banqueros de inversión están tratando de equiparar, hacer comparaciones de manzanas con manzanas. Esto puede llevar un poco más de tiempo de lo esperado", dijo una de las personas.
Citgo opera tres refinerías que pueden procesar hasta 807.000 barriles por día de petróleo y posee una red de terminales de almacenamiento y ductos. En 2019, rompió vínculos con su casa matriz, la petrolera estatal PDVSA con sede en Caracas.
La administración del presidente Nicolás Maduro y su oposición política han solicitado al gobierno de Estados Unidos que retrase o detenga la subasta para que sus resultados no alteren el resultado electoral.
En una primera ronda de licitaciones celebrada en enero, las ofertas presentadas por los inversores alcanzaron los 7.300 millones de dólares, frente a una valoración de mercado de entre 11.000 y 13.000 millones de dólares por el refinador.
Los abogados que representan a Venezuela calificaron las ofertas de "decepcionantes" y recientemente han presionado al tribunal para que organice una tercera ronda si las ofertas de la segunda ronda, que finalizó este mes, no se acercan a un valor justo para la empresa.
Al menos cinco grupos de inversores presentaron ofertas vinculantes en la segunda ronda y tres aseguraron compromisos de financiamiento de bancos y asesores, incluidos JPMorgan, Morgan Stanley y Rothschild & Co, según dijeron a Reuters este mes fuentes cercanas al asunto.
El tribunal aún no ha revelado el número de ofertas remitidas en la segunda ronda ni sus montos.
Citgo, las juntas que supervisan al refinador y un funcionario judicial designado para supervisar la subasta no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
"Hay 100 razones por las que esta subasta no debería realizarse con prisa", dijo una persona familiarizada con el proceso de venta, destacando la proximidad de las elecciones presidenciales en Venezuela.
"Existe la posibilidad de que llegue un nuevo gobierno que cumpla con sus obligaciones (...) y no querrá que este activo sea vendido. El tribunal podría mostrar un poco de sensatez, un poco de moderación, y ver qué pasa", añadió la persona.
Reuters