El Gobierno de Venezuela tildó de mentiras y acusaciones infundadas las declaraciones de la «ridícula» Misión de la ONU para ese país. Más temprano la misión indicó que se está reactivando «la modalidad más violenta de represión» con detenciones a opositores acusados de supuestas conspiraciones.
A través de un comunicado, el Ejecutivo venezolano rechazó, «de manera contundente», las declaraciones «emitidas por la falsa y vergonzosa» misión de la ONU en la presentación de un nuevo informe. Según Caracas, el mundo «ha sido testigo hoy de una de las páginas más vergonzosas en materia de derechos humanos».
La presidenta de la misión, la portuguesa Marta Valiñas, dijo ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, que las autoridades venezolanas «invocan conspiraciones reales o ficticias para amedrentar, detener y procesar a personas opositoras o críticas del Gobierno». Señaló que se ha pasado a un periodo más violento para silenciar las voces del antichavismo a cualquier precio.
Alertó de acciones que «ponen en evidencia las graves dificultades que existen para garantizar que las próximas elecciones presidenciales se desarrollen de conformidad con el derecho a participar en los asuntos públicos», entre las que mencionó la ratificación de la inhabilitación de María Corina Machado, elegida candidata de la principal alianza opositora.
La respuesta de Venezuela a la Misión de la ONU
El gobierno de Nicolás Maduro acusó a la misión de emitir «juicios parcializados con fines meramente políticos». También de ser «cómplice de sectores extremistas que han promovido sanciones inhumanas a Venezuela» y que, «reiteradamente, han exhibido planes de asesinar al mandatario Nicolás Maduro y causar caos y destrucción a su pueblo».
Por tanto, el Gobierno chavista instó al Consejo de Derechos Humanos de la ONU a «desestimar cualquier argumento amañado de dicha misión, que no ha pisado» el país y que «utiliza métodos poco profesionales para presentar un panfleto partidista que debe ser rechazado de manera categórica».
«Venezuela no acepta ni aceptará ninguna medida que se desprenda de este adefesio, presentado ante un Consejo que nada ha hecho por detener el genocidio al pueblo palestino». Reiteró su compromiso con la «promoción, respeto protección» de los DD.HH. «como un valor supremo».
EFE