El reciente informe presentado por la ONG Una Ventana a la Libertad (UVL) reveló que durante el año 2023, los hombres y mujeres que se encuentran privados de libertad, es decir, bajo custodia del Estado venezolano, siguen muriendo de complicaciones respiratorias, tuberculosis, desnutrición, cáncer e infartos, entre otras enfermedades.
A través del Informe Anual la ONG indicó que al menos 17 personas, recluidas en centros de detención preventiva o retenes policiales, fallecieron por razones de salud: 8 durante el primer semestre y 9 durante el segundo semestre 2023. Durante este periodo falleció otro detenido que se había fugado y fue recapturado.
La organización llama la atención sobre la violencia auto infligida y destaca que en el año 2023 se registraron 5 casos de suicidios dentro de algunos calabozos policiales.
La investigación revela también que un privado de libertad, recluido en un calabozo policial, murió luego de recibir un golpe en el abdomen.
Prisiones con similar precariedad
En cuanto a las cárceles, prisiones o internados judiciales la situación de precariedad es similar.
UVL logró registrar la muerte de 19 hombres por:Complicaciones pulmonares/ respiratorias (7),
Hemorragia digestiva (1),
Meningitis (1),
Paludismo (1),
Tuberculosis (8)
Tumor cerebral (1)
A esta cantidad hay que sumarle el fallecimiento de tres mujeres:tuberculosis (1),
cáncer (1) y
desnutrición (1)
«La tuberculosis, enfermedad infectocontagiosa que persiste entre la población reclusa venezolana, cobra fuerza y se expande con facilidad por el nivel de hacinamiento, porque las celdas no tienen suficiente ventilación, porque en estos lugares escasea el agua potable, porque los presos no son expuestos con frecuencia a la luz solar y porque los enfermos conviven con los sanos», señala el informe.
Hacinamiento
El año 2022 culminó con un total de 16.837 personas detenidas en calabozos policiales: 15.280 hombres (90,7%) y 1.557 mujeres (9,3%). Este año cerró con un hacinamiento de 176,2%. Durante el año 2023, Una Ventana a la Libertad logró monitorear la situación de la siguiente cantidad de calabozos policiales a nivel nacional: primer semestre: 282 y segundo semestre: 293.
La organización indica que al evaluar detenidamente la situación en estos lugares determinó que al cierre del año 2023 el hacinamiento en los centros de detención preventiva alcanzó la cifra de 189,31%.
A manera de ejemplo: En el Distrito Capital (Caracas) la capacidad instalada es de 1.053 cupos y el 2023 cerró con 3.036 detenidos (a), lo que se traduce en un hacinamiento del 288,59% y en el estado Zulia la capacidad instalada es de 930 cupos y el año 2023 cerró con 2.473 detenidos (as) alcanzando un hacinamiento de 265,91%.
Monitoreamos